En la presentación que Microsoft hizo de la consola en el pasado E3 asistíamos a un juego que ofrecía por fin algo nuevo, una jugabilidad novedosa, frenética e intensa y a la vez que se sentía como distinto a lo que estábamos acostumbrados gracias a la inclusión de nuevos elementos jugables. Nos referimos, como ya os podréis imaginar, a los los poderosos titanes y, no menos importante, el parkour que nos va a permitir movernos libremente por los escenarios, escalar hasta los puntos más altos de los escenarios, encadenar espectaculares acciones o asaltar a los poderosos gigantes de metal que dan nombre al juego, por citar solo algunos de los ejemplos.
La primera toma de contacto que tuvimos con el juego hace unos meses ya nos permitió comprobar que, en efecto, estábamos ante algo grande, uno de esos juegos que llegan para redefinir un género y aportar un soplo de aire fresco. La beta de hace unas semanas no hizo más que confirmar las excelentes sensaciones que nos había dejado ya. Un título frenético, que apuesta por mezclar la jugabilidad clásica que tanto nos gustó en la serie Modern Warfare de Call of Duty con nuevas mecánicas. Las expectativas, por tanto, que teníamos ante la versión del producto final eran muy altas. Y la realidad es que, a pesar de ellas, el juego las ha logrado incluso superar, gracias a una de las propuestas jugables más divertidas y adictivas que hemos probado en los últimos años en cualquier género, no sólo en el de los FPS.
El debut del estudio Respawn Entertainment no podía haber sido mejor, ya que pocas veces una empresa inicia su andadura con un juego de semejante calidad y que, además, revoluciona el género gracias a su excelente jugabilidad. No es de extrañar que detrás de este proyecto tan ambicioso se encuentren algunos de los nombres más prestigiosos del género, como Jason West y Vince Zampella, creadores de la citada serie Call of Duty: Modern Warfare, de Infinity Ward. Hace unos años decidieron que el momento de iniciar una nueva aventura, para lo que crearon un nuevo estudio en el que poder exprimir su experiencia y conocimientos en shooters, al mismo tiempo que experimentaban con nuevas ideas. Para ello se reunieron de un equipo de gran talento. La idea estaba clara: aportar ideas frescas a un género muy estancado y, al mismo tiempo, revolucionarlo con un planteamiento completamente multijugador. Electronic Arts apostó fuerte por este proyecto, y el tiempo ha demostrado que no estaba equivocada.
Ahora, con el juego ya a la venta, no podemos más que aplaudir su decisión, ya que Titanfall es uno de los mejores y más espectaculares shooters de los últimos años. El resultado es tan bueno que no tenemos dudas sobre que estamos ante el nacimiento de una saga de enorme éxito, que a buen seguro va a permitir revolucionar también las ventas de Xbox One. Además, su lanzamiento en PC y Xbox 360 garantiza también una comunidad muy amplia de jugadores, con el consiguiente apoyo necesario para que una nueva IP siga creciendo.
Y eso que Titanfall de primeras se podría pensar que es una propuesta bastante arriesgada, ya que prescinde de una campaña para un jugador, y apoya toda su propuesta jugable al multijugador, tanto a la hora de ofrecer una campaña como a los modos más clásicos competitivos.
El juego tiene una poderosa puesta en escena, creando un rico y atractivo mundo. Nos referimos a La Frontera, un vasto territorio situado en algún lugar de la galaxia. Esta región cuenta con numerosos mundos, muchos que todavía no han sido explotados. En este universo tan rico es donde se desarrolla la campaña multijugador de Titanfall, a través de los extensos mapas incluidos. En total, recorreremos 15 mapas, un número más que considerable y que nos garantiza una gran variedad de localizaciones. Además, como veremos más adelante, estos mapas son otros de los protagonistas del juego, ya que la maestría con la que han sido desarrollados es digna de elogio.
La Frontera será el telón de fondo donde se desarrollarán los combates entre pioneros, exploradores, mercenarios, fugitivos y soldados. El juego nos invita a formar parte en uno de los dos bandos y enfrentarnos en intensas y frenéticas partidas de 6 vs 6 jugadores. Los das dos facciones son la IMC, que son un grupo militar que trabaja para la organización Hammong Engineering, siendo su misión la extracción de los bienes naturales de La Frontera para maximizar sus beneficios y poder construir los poderosos titanes. Por otro lado está la Milicia, formada por colonos, bandidos, mercenarios y piratas que se encargan de proteger los distintos territorios de este universo de la IMC.
Como vemos, a pesar de ser un juego completamente multijugador, se ha introducido una historia bastante atractiva, que sirve de excusa perfecta para repartir plomo a diestro y siniestro, al mismo tiempo que nos movemos sin parar por los escenarios, realizando todo tipo de florituras, y nos ponemos a los mandos de los poderosos titanes. Incluso, antes de las misiones se nos irá contando la historia, por lo que no nos dará la sensación de estar únicamente matando por pura diversión, sino que formaremos parte de un todo, de manera que en medio de las partidas también tendrá lugar determinados "acontecimientos".
Pero antes de comenzar con las campañas, el juego cuenta con un extenso y completo tutorial que nos enseñará todas las mecánicas y aspectos fundamentales del juego, como son los distintos movimientos, las técnicas de parkour, el uso de las distintas armas, incluyendo la sorprendente arma inteligente o el uso de los titanes. Todo un acierto porque nos permite aprender todo lo que necesitamos saber antes de ponernos en acción.
Titanfall ofrece mucho más de lo que estamos acostumbrados en otros shooters. Aquí no sólo nos tenemos que centrar en disparar a todo lo que se mueva o cumplir objetivos en los distintos modos de juego, sino que contaremos con una libertad total gracias a las posibilidades que ofrece el sistema de movimiento. Y es que vamos a poder deslizarnos por muros, encadenar movimientos entre paredes para llegar más alto, suspendernos en el aire, realizar increíbles saltos, asaltar titanes enemigos o de otros compañeros o aprovechar las alturas y los recovecos de cada escenario para sorprender a nuestros rivales. Pero aún hay más, ya que poco a poco iremos ganando nuevas armas, accesorios, titanes y habilidades.
En este punto, queremos destacar un aspecto que nos ha encantado. Nos referimos a la inclusión de las cartas de todo tipo que podremos escoger -con un máximo de 3- antes de las partidas. La variedad de estas cartas es inmensa, ofreciéndonos importantes ventajas en las partidas. Según cumplamos retos y ganando partidas, iremos ganando nuevas cartas que se irán sumando a nuestra particular baraja. Entre partida y partida, es buen momento para echar un vistazo a estas cartas y escoger las que más nos puedan ayudar. Si sabemos escogerlas bien, podremos sacar un gran provecho para las partidas. Pero siempre teniendo en cuenta que la acción de estas cartas durará mientras que no seamos eliminados, por lo que deberemos escoger muy bien cuándo utilizarlas.
A pesar de ser un juego en el que prima la acción más vibrante y frenética, la inclusión de las cartas, los titanes y el maravilloso diseño de los niveles introducen un importante componente estratégico en las partidas. Es más, de nada nos servirá disparar sin parar, si no sabemos utilizar toda nuestra habilidad para movernos por los escenarios, aprovechar los titanes o hacer un buen uso de las cartas y tácticas de combate en equipo.
Una vez que hayamos completado el tutorial, darán comienzo las dos campañas, una por bando. Además de permitirnos introducirnos en alguno de los modos de juego clásicos de los que hablaremos después, esta modalidad resulta de lo más espectacular en cada una de las nueves misiones de que consta cada una, correspondiéndose a su vez a un mapa diferente. Como ya hemos indicado más arriba, antes de comenzar la misión se nos realizará una pequeña introducción desde la nave antes de lanzarnos.
La campaña, tanto desde el lado de la IMC como de la milicia, irá cambiando en función de si nuestro grupo gana o pierde, con un final diferente y distintos diálogos en el transcurso de las misiones. Puede que algunos jugadores echen en falta una campaña para jugar en solitario, pero el estudio ha apostado fuerte por ofrecer una experiencia nueva, y la realidad es que el resultado es sumamente gratificante, porque se potencia también el trabajo en equipo para conseguir los objetivos y no nos da la sensación de estar viviendo las mismas situaciones y scripts como suceden en otros títulos.
Una vez completemos la campaña desde el punto de vista de las dos facciones, será el momento de ponernos con el plato fuerte del juego: el multijugador competitivo, que viene cargado de contenido, en forma de modos de juego, sistema de progresión, mejoras, nuevas armas y adquisición de ventajas y nuevas habilidades.
Aunque en la campaña ya nos daremos cuenta de que estamos ante un título divertidísimo, será en los modos clásicos donde podremos exprimir al máximo todas las posibilidades que nos ofrece la obra de Respawn. Cantidad y calidad van de la mano como pocas veces hemos visto antes, por lo que os podemos asegurar que desde la primera partida ya estaréis enganchados a las nuevas mecánicas y jugabilidad que atesora este maravilla en forma de juego.
El primer modo, que ya conoceremos de la campaña, es Desgaste, que es el clásico duelo por equipos, en el que deberemos eliminar a enemigos (humanos o manejados por la máquina) para conseguir puntos de desgaste. Gana el primer equipo que llegue a 250 puntos o el que tenga más puntuación al completarse el tiempo. En Dominio de Fortines deberemos tomar el control y conservar los tres fortines situados por el mapa para obtener puntos. Un modo divertidísimo ya que combina la eliminación de enemigos para capturar el fortín con la estrategia para conservar su control.
Si lo que deseamos es espectaculares enfrentamientos entra titanes, tendremos a nuestra disposición el modo Último Titán en pie. Se trata de eliminar a todos los titanes del otro equipo para ganar cada una de las rondas, de un total de cinco. Si morimos en una ronda, no aparecemos hasta la siguiente. Otro modo que nos ha encantado es el clásico Captura la bandera, que es perfecto para un juego como este tipo que introduce el parkour, ya que deberemos demostrar toda nuestra habilidad para robar la bandera enemiga y llevarla hasta nuestra base. Este modo abre un mundo de posibilidades tácticas a la hora de cooperar en equipo.
Cazapilotos es parecido a Desgaste, solo que aquí puntuarán las muertes de pilotos, por lo que es un modo algo más pausado, ya que los jugadores buscarán esconderse y acabar con el resto, pudiendo utilizar para despistar titanes o grunts. Por último, tenemos Modo Variado, que no es otra cosa que una mezcla de todos los anteriores, alternando entre un modo u otro entre cada partida.
En cualquiera de estos modos de juego la libertad es total a la hora de decidir nuestro estilo de juego, incluso pudiendo cambiar en medio de las partidas entre un juego más directo y frenético u optar por el sigilo o el combate más visceral a bordo de los titanes. En cualquier caso, el nivel de adicción es máximo como notaremos desde el primer momento. Es más a buen seguro que estarás diciéndote a ti mismo cada vez que juegues aquello de "bueno, una partida más y lo dejo", y así durante horas, ya que el tiempo pasa volando literalmente con Titanfall, lo cual dice mucho del juego.
El juego se adapta a todo tipo de jugadores, desde los más novatos a los más expertos en el género, de manera que los primeros nunca se sientan frustrados y lo segundos siempre encuentren motivos para seguir jugando sin que el interés decaiga. Las posibilidades son infinitas a la hora de afrontar cada misión, hasta el punto de que ninguna partida es igual. Lo que no varía es lo divertido que resulta meterte en estas auténticas batallas a gran escala que se forman en cada partida. Además, cada modo de juego requiere de una táctica distinta si queremos tener más posibilidades de vencer.
Realizar parkour por los escenarios resulta apasionante, ya que nos permitir aprovechar todos los elementos de cada mapa para huir o sorprender a nuestros rivales. El sistema de control resulta de lo más intuitivo pero al mismo tiempo repleto de posibilidades. Además, podremos ir mejorando nuestra habilidad para que podamos ser auténticos expertos en esta disciplina. Este sistema es uno de los grandes atractivos del juego, siendo todo un acierto su inclusión por lo novedoso y divertido que resulta. No nos extrañaría que este estilo sea utilizado en próximos juegos del género, ya que hace de cada partida una bendita locura de la que no querrás escapar.
No solo deberemos acabar con los pilotos y titanes del equipo contrario, sino que en el campo de batalla nos encontraremos con otros enemigos manejados por la IA, que tendrán una gran influencia en el desarrollo y desenlace de las partidas. Estamos de los soldados (grunts) y espectros. Podríamos decir que son como los típicos bots de otros juegos, solo que aquí juegan un papel muy importante dado el gran número de ellos que nos encontraremos. Será difícil que acaben con nosotros, pero su misión principal es molestar e impedir que ciertos jugadores se pasen toda la partida "campeando". Podría pensarse que su presencia es accesoria, pero nada más lejos de la realidad, ya que aportan un gran componente táctico.
Estos enemigos manejados por la máquina irán apareciendo al comienzo y en medio de la partida, y no solo intentarán molestar, sino que muchas veces nos servirán para detectar dónde se encuentran pilotos del equipos contrario. Además, su eliminación nos da puntos también, que nos pueden venir bien para sumar.
En este punto es importante hablar del sistema de puntuación, ya que eliminar a un piloto nos dará cuatro puntos, destruir a un titán cinco, mientras que los soldados y grunts nos proporcionará un punto. El jugador debe encontrar el equilibrio entre matar pilotos, titanes y grunts, de manera que sumemos el mayor número de puntos posibles para nuestro equipo. De nada nos servirá matar a un montón de grunts, si luego no hemos acabado con pilotos y titanes, que son los que nos permitirán tener altas puntuaciones. Una vez más, una decisión muy acertada que permite que las partidas sean mucho más intensas y diferentes a lo que estamos acostumbrados.
Este sistema tan dinámico permite que las partidas, por lo general, se desarrollen de una forma muy rápida, sin casi ningún segundo de descanso. No obstante, en medio de las partidas no pararemos de tomar distintos roles, ya sea como pilotos, moviéndonos por las paredes, tomando titanes o intentando conseguir los objetivos de cada modo de juego.
Cuando somos pilotos podemos realizar una amplia variedad de acciones que van desde realizar parkour por los escenarios, piratear espectros o torretas, dar órdenes a nuestros titán o eliminar a los del contrario con nuestro arma anti-titán, subirnos a hombros de estos espectaculares mechas y, claro está, acabar con otros pilotos y soldados.
Como pilotos contaremos con un arma principal, una secundaria, otra anti-titán, explosivos, una función táctica (camuflaje, estimulante y pulso de radar activo) y distintas habilidades y mejoras que iremos desbloqueando en los kit de nivel y 1 2. El juego cuenta con un gran sistema de progreso, que nos permitirá desbloquear muchas mejoras, armas y habilidades según vayamos incrementando nuestro nivel. Para ello deberemos sumar puntos XP, matando enemigos, consiguiendo retos o ganando partidas.
El sistema de retos resulta de lo más atractivo, ya que nos anima a cumplir un número inmenso de desafíos (casi 1.000), que a su vez nos permitirán desbloquear mejores cartas. Así, iremos ganando puntos de experiencia por todas las acciones que realicemos en el transcurso de las partidas.
Hay que destacar la exquisita selección de armas incluidas, que van desde los clásicos rifles y subfusiles de varios tipos, aunque aquí con un toque futurista, a carabinas, escopetas y rifles de francotirador. No hay ninguna arma que este "dopada", sino que todas están muy equilibradas, de manera que sea el jugador el que elija las que mejor se adapten a su estilo. Destacar la Smart Pistol, una pistola que dispara de manera automática una vez fijados los objetivos, aunque muchas veces nos dejará vendidos en enfrentamientos directos por lo lenta que es. Como no podía ser menos, iremos desbloqueando también nuevos accesorios para las armas, como silenciadores, distintos tipos de mirilla o cargadores ampliados.
También tienen una gran importancia las ventajas que utilicemos, ya que nos pueden otorgar habilidades como el camuflaje, que nos permitirá ser casi invisibles durante unos instantes. También tenemos el radar que nos detectar con mayor exactitud a los enemigos incluso a través de las paredes o el paquete de estimulantes, para los que buscan correr y saltar aún con mayor agilidad y velocidad.
Pero claro, los grandes protagonistas del juego son los imponentes titanes, que supone la principal novedad, aunque no la única tal y como estamos viendo. A diferencia de los pilotos, ágiles y rápidos, estos titanes son mucho más lentos y toscos en sus movimientos. En cambio, todo lo que pierden de movilidad lo ganan en fuerza y poderío. Y es que estamos ante auténticas máquinas de matar y arrasar con todo. Además, su barra de salud es independiente de la del piloto, por lo que juegan también un papel muy importante a la hora de aguantar más. Antes de ser destruidos, tendremos la posibilidad de eyectar y así seguir jugando con nuestro piloto (a no ser que no salgamos antes de que explote o algún titan agarre al piloto y acabe con él de una manera muy bestia).
Podemos escoger, una vez desbloqueados, entre tres modelos: Atlas, que es el más equilibrado, con una buena protección, movilidad y armamento. Stryder es el más ágil y rápido, aunque cuenta con un menor potencial de ataque. Por último, Ogre es el más resistente y fuerte en el cuerpo a cuerpo, aunque también el más lento y pesado.
El arsenal de estos titanes se compone de un arma principal, una secundaria, una habilidad táctica y dos ranuras para mejoras. Nuestro consejo es que probéis todos, ya que se diferencian bastante, por lo que cada jugador encontrará el que mejor se adapte a su estilo. Además, el numero de armas y mejoras que podremos ir desbloqueando es bastante variado. Pero sobre todo lo fundamental es saber manejar nuestro titán, no solo para evitar los ataques a distancia y cuerpo a cuerpo, sino a calcular bien cuando utilizar el escudo, las armas especiales o tener en cuenta el "timing" a la hora de combatir con los puños.
Pero todas estas posibilidades no valdrían para nada sin un buen diseño de los mapas. Por fortuna, podemos afirmar que estamos ante los mapas mejor diseñados que hemos encontrado en el género. Cada uno de los quince mapas están pensados para poner en juego nuestras habilidades y todas las mecánicas de las que ya os hemos hablado. Hasta el último rincón de los escenarios, muro o cartel tiene su razón de ser, de manera que podamos utilizarlos para escondernos, rodear a nuestros enemigos y movernos encadenando saltos haciendo parkour. Además, todos los mapas apuestan acertadamente por la verticalidad, de manera que podremos movernos a muy distintas alturas. Precisamente, en algunos modos de juego, subirnos a grandes alturas será fundamental para tener una visión muy completa de los mapas y los enemigos, además de evitar con mayor facilidad el brutal ataque de los titanes y el resto de pilotos.
Cada uno de los mapas tienen las dimensiones idóneas para vivir partidas frenéticas en las que poder optar por una gran variedad de estilos de juego. Son bastantes grandes, pero sin llegar a abrumar, por lo que la acción no decae ni un segundo. Este apartado es un perfecto ejemplo de la maestría demostrada por el estudio, ya que están medidos al milímetros. Por si fuera poco, gráficamente resultan muy atractivos, con una gran variedad de entornos y localizaciones. Un trabajo excelente que enlaza calidad con cantidad como pocas veces en el género.
En definitiva, una oferta jugable de lo más generosa que se combina con unas mecánicas y jugabilidad soberbias, por lo que estamos un juego sumamente recomendable para todos los usuarios de Xbox One, Xbox 360 y PC. Un título imprescindible para cualquier amante de los shooters, que al mismo tiempo busquen algo nuevo.
Gráficos
Lo primero que hay que destacar del apartado gráfico de Titanfall es un aspecto fundamental en cualquier shooter: los mapas. Y es que pocas veces hemos visto unos escenarios de batalla tan bien realizados, con un diseño magnífico que permite exprimir al máximo la novedosa jugabilidad del título, además de ofrecer un grandísimo rendimiento.
Aunque en un primer momento podía extrañar que se escogiera un motor gráfico tan veterano como el Source Engine, el resultado final ha dado la razón a sus creadores, ya que esto ha permitido exprimirlo al máximo, obteniendo un magnífico rendimiento, funcionando en todo momento la versión de One a 60 fps. Además, el aspecto que muestra el juego, en general, es estúpendo, con unos mapeados de grandes dimensiones, elementos dinámicos y multitud de explosiones y efectos de luz, sin que el conjunto se resienta. Los mapas cuentan con multitud de elementos por los que realizar parkour, gracias también a su verticalidad que potencia la intensidad de las partidas.
Grandes protagonistas del juego, no podemos sino alabar la inclusión de los titanes, unos espectaculares mechas gigantes que llevan los enfrentamientos a un nivel nivel. Su recreación en pantalla es abrumador, con un nivel de detalle y unas animaciones fantásticas.
Pero lo mejor que podemos decir del apartado técnico, es que todo resulta tan divertido, frenético e intenso, que nos sentiremos dentro de la acción como pocos juegos han podido ofrecer. Por lo que no merece la pena decir si podría tener o menos resolución en un juego de estas características en el que prima la diversión por encima de todo. Un todo que ha sido diseñado con una única idea en mente: divertir al jugador.
Sonido
Este apartado también raya a un gran nivel, con unos altos valores de producción, incluyendo un doblaje de calidad a nuestro idioma. Aunque no es un aspecto determinante en un juego de estas características, se agradece el gran número de diálogos que se han incluido en perfecto castellano, permitiendo un mayor nivel de inmersión en las batallas. Los efectos de sonido es otro punto fuerte de Titanfall, gracias a su enorme variedad y lo rotundos que suenan. Por último, la banda sonora, que ha corrido a cargo de Stephen Barton, tiene un marcado carácter épico.
Conclusión
Titanfall prometía revolucionar un género tan necesitado de novedades como el de los shooters en primera persona. En nuestra opinión no sólo lo consigue, sino que se convierte en una de las mejores experiencias de los últimos años.
Xbox One tiene ya su "vende consolas", un título que aporta un nuevo enfoque, gracias a la inclusión del parkour, que nos permitirá encadenar saltos y correr por muros, y los imponentes titanes. Un diseño de niveles magnífico permite aprovechar al máximo estas dos características.
Han sido más de tres años de desarrollo, pero el esfuerzo ha merecido la pena, ya que Respawn nos trae un juego imprescindible, sin duda, el mejor juego de la recién estrenada generación. Centrado exclusivamente en su faceta multijugador, nos invita a disfrutar de una experiencia única e intensa como pocas, con una oferta jugable de lo más generosa y una jugabilidad suprema. Pocas veces nos hemos divertido tanto como en las decenas de horas que llevamos echadas a Titanfall en la redacción. No te lo pienses, tendrás meses y meses de diversión, en los que difícilmente pensarás en jugar a otro juego multijugador.
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