

En Altium Blog puedes encontrar una gran cantidad de usos, todos escritos por expertos en el diseño de PCB.
Normas PCB
Al igual que en todos los productos, hay que seguir una serie de normas. En el caso del PCB hay que regirse por el IPC (Association Connecting Electronics Industries). Fue en el año 1995 cuando desarrollaron distintas normas, donde se ayuda a que el proceso esté más optimizado y se reduzca el tiempo de lanzamiento al mercado, pudiendo obtener así un mejor producto. Miles de multinacionales famosas y consolidadas en el mercado actual están afiliadas al IPC, como: Samsung, Flextronics o Siemens. Aunque también se pueden encontrar fabricantes de circuitos, técnicos, diseñadores y toda clase de profesionales interesados en este tipo de conectividad.
¿Por qué seguir las normas?
Gracias al gran avance de las tecnologías al que estamos haciendo frente, cada vez son más los estudiantes, ingenieros, técnicos, investigadores... que se interesan por el PCB. El aspecto negativo es que muchos no conocen las normas ni reglas que existen detrás, teniendo que aprenderlas. A la hora de certificar correctamente, esta serie de normas pueden ayudar a que el producto que se ha diseñado sea totalmente compatible para su función específica o tenga EMC (Electromagnetic Compatibility). También pueden ayudar a que el tiempo de lanzamiento al mercado se acelere, existan menos costes de producción y que haya la mínima cantidad de errores posibles antes de su revisión.


Consejos para el diseño PCB
Estéticamente no se puede lanzar al mercado un producto que no sea agradable a la vista, aunque funcione correctamente. Como ya sabrás, el objetivo principal de las PCB es que puedan enrutar la electricidad, de ahí que la mayoría de desperfectos tengan una naturaleza eléctrica. ¿En qué hay que prestar especial atención? Sobre todo, en la pasta de soldadura que se utiliza, la contaminación o los huecos y grietas que puedan existir: 1) Pasta de soldadura Lo más importante es lograr formar una unión sólida, nadie quiere que se rompa en el primer uso. Por otro lado, está el problema de las temperaturas que se alcanzan, existiendo puntos más calientes que otros. Es necesario, en el momento de aplicar la pasta, que la relación de aspecto sea la adecuada, así como verificar que todo esté realizado correctamente. 2) Contaminación Los componentes que se utilizan pueden estar contaminados por distintas fuentes, desde la propia pasta hasta el aire o las pequeñas partículas de polvo que están en el ambiente. Todo esto hace que la corrosión se acelere, impidiendo que la soldadura esté correctamente adherida. 3) Huecos y grietas Cuando existen irregularidades en la superficie no se consigue el resultado esperado. Lo más normal cuando esto ocurre es que aparezcan problemas en la máscara o los componentes estén deformados, aunque también puede ser un factor térmico.