Los expertos señalan a los navegadores como a los principales afectados por este boom de los teléfonos inteligentes. Se cree que el número de ventas de estos navegadores, a nivel mundial, llegará a su nivel máximo el próximo año, alcanzando los 42 millones de unidades vendidas antes de iniciar un descenso gradual y situarse en los 30 millones para el año 2015.
Sin embargo, las empresas líderes de la industria de navegación como Garmin y Tom Tom se defienden cambiando de terreno. En la actualidad están perfeccionando la tecnología y siguen creando navegadores GPS integrados en el coche para fabricantes como Renault, Mazda y Fiat. Además, de mantener sus propias aplicaciones móviles.
La venta de los GPS iba a buen ritmo hasta octubre de 2008, cuando Google presentó el sistema operativo Android, que incluía Google Maps. Desde entonces, ya son 45 millones de personas las que han adquirido el GPS para los teléfonos Android y lo utilizan en sus vehículos.
Apple también han sufrido un cambio en sus ventas debido al auge de los teléfonos inteligentes; pero en este caso en sus propios productos. Las ventas de iPhone y iPad han absorbido las de iPod y de los reproductores de vídeo. Según las cifras publicadas por la propia compañía, el iPod alcanzó su punto máximo en 2008, un año después de que Apple presentara el iPhone, con 55,4 millones de unidades. Estas cifras cayeron a los 52,4 millones justo un año después.
Otro de los dispositivos con los que cuentan los teléfonos inteligentes, las cámaras digitales, también se ha visto perjudicado. Las ventas mundiales cayeron a 125 millones de unidades en 2009 desde los 140 millones que se vendieron en 2008.
Si a la masiva llegada de los smartphones le añadimos la recesión económica mundial y el aumento de la popularidad de las cámaras réflex, el resultado es una bajada en las ventas de cámaras digitales de gama baja alarmante.
Todos los datos son recogidos por un reciente estudio publicado por los analistas de Berg Insight.
Imagen sujeta a licencia CC de From_ko
